16.11.06

Esta noche me emborracho

Imposible. Imposible. No es imposible. Soy yo que me ahogo en una contradicción. No quiero tener que incluirte en el álbum de mis “ex” dentro unos meses. Sin embargo me muero por despertarme otra vez con vos. ¿Sabés qué es lo peor de todo? Que rankeás tan alto que no imagino quien podrá superarte. Vaticino un celibato eterno para mi corazón. Digo bien, para mi corazón, porque el cuerpo es más fácil de engañar, se conforma con saciar las ganas. Pero el cuore tiene pretensiones. No lo convence cualquier interlocutor ni se deja sobornar por manos inquietas. Es el que tiene la última palabra y no acata órdenes de su vecina de arriba: la razón. Necesito seguir con mi vida. Necesito rendir en otras funciones. Voy a emborrachar a la autoridad con tequila. Que no sienta, que disminuya su latir, que se duerma y no moleste con interrogatorios de servicio secreto. Que nos deje salir de gira y olvidar lo que no queremos olvidar. Dejémoslo encadenado a sus sentimientos y arrasemos con quien quiera dormir de a dos. Ya habrá tiempo para volver a sufrir y acordarme de lo que siento por vos.

No hay comentarios.: