6.11.06

Muy temprano!

Suenan dos campanadas en este amanecer de palabras fáciles. Se arma un escenario con preguntas sin respuesta, una escalera y el sol pidiendo permiso para entrar por la ventana. Una columna en el medio del lugar. Solitaria como yo. Un mate monogámico eyacula en mi boca agua caliente. Mi estómago pide menos que mi alma que se atraganta con besos y se muere indigestada. Me visto de rojo y trato de olvidar lo que me hizo mal. No importan los caminos ajenos, importan mis pasos. No hay más tierra que la que pisan mis pies mientras avanzo. Estoy buscando a mi lector apasionado. Todos morimos de vivir pero yo acelero el proceso con heridas mal curadas y amores imposibles. No sé vivir en otro lugar que no sea este pelotero de palabras: pataleando, nadando, ahogándome.

No hay comentarios.: